Los productos favoritos de El Comidista en 2021

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Como el Almax, como el reencuentro con ese familiar poco querido, como los jerséis horteras, como el áspic y el turrón, el clásico artículo con nuestros productos comestibles y bebibles preferidos del año vuelve a El Comidista por Navidad. En este 2021 algo raruno teníamos aún más ganas de publicar esos descubrimientos gastronómicos en forma de botella de vino, lata de conserva o mezcla de especias para que también vosotros podáis disfrutar de ese momento de regocijo que causan. Porque poco hay mejor que compartir la comida, aunque en este caso no pueda ser físicamente -y moralmente, que añadía el Mesías- en la misma mesa.

Comidisters y comidisters, aquí tenéis los productos que más felices nos han hecho en estos meses:

PARA COMER

Huevos de Cobardes y Gallinas

Empezamos esta selección con los huevos que vende la marca Cobardes y Gallinas, uno de los productos del año para el gerifalte comidista Mikel López Iturriaga: “En algún vídeo me he burlado de la actual fiebre por los huevos de gallinas camperas, felices, biodinámicas y autorrealizadas, pero eso no significa que no existan productores que se esfuerzan de verdad en dar un trato digno y una buena alimentación a estas aves, y producir así mejores huevos”, dice Mikel liando de forma ordenada unos metros de cable que tenía en casa. “Los de Cobardes y Gallinas son excelentes, y con ellos no hace falta más que prepararte una simple tortilla francesa para notar la diferencia”, apunta. Precio: en El Corte Inglés vale 4,95 euros la media docena.

Puerros en conserva de Victofer

La periodista gastronómica Lakshmi Aguirre asegura desconocer qué han hecho los alaveses de Victofer con esos puerros para conseguir que se coma uno sea la hora que sea, así sin más, como si fuera un pepinillo. “Son dulces pero con el punto exacto de sal, son jugosos y tan cremosos que se deshacen en la boca. Si los abres por la mitad y los riegas con una vinagreta de pimientos rojo y verde y cebolleta, todo muy picado, y les pones unas buenas anchoas, obtienes un subidón en plato”, aconseja la redactora comidister. “Una copita de txakolí con un puntito de aguja y a volar”, remata Lakshmi. Precio: puedes comprar un kilo de puerros al natural en la tienda online de la compañía por 5,60 euros.

Anchoas de López

“Soy una loca del producto, cuanto más desnudo, mejor. Además, valoro el respeto y el esmero a la hora de trabajarlo, y de ahí que recomiende Anchoas López, una empresa familiar que cuenta con obrador de salazones en Valencia, pero trabaja con el mejor género del Cantábrico”, comenta la periodista Almudena Ortuño. “En serio, podría abrirme una lata cada noche, pero el tensiómetro se estropearía, así que prefiero reservar el manjar para acompañar los vinos y las risas”, afirma Almudena sobre esta conserva. Precio: una lata con 8 unidades cuesta 15,76 euros en la web de la conservera.

Queso Floquet de Neu, de Formatges Vilavella

La segunda recomendación que nos hace Mikel López Iturriaga es el Copito de nieve. El mono no, en paz descanse, el queso que elabora la empresa ilerdense Formatges Vilavella. “Elegir entre los cientos de quesos extraordinarios que se producen en España hace crujir las neuronas a un indeciso como yo, pero si hay uno que se me ha grabado en la memoria es el Floquet de Neu, un queso de cabra fresco, suave y extrañamente ligero, pero no aburrido gracias a sus leves notas ácidas y amargas”, declara Mikel. Tal y como señala el sultán comidista, “uno más en la larga lista de productazos que puedes encontrar en el Pallars Jussà leridano”. Precio: ahora mismo Formatges Vilavella se encuentra sin stock de quesos, así que habrá que esperar, según nos han comentado, hasta febrero o marzo para poder adquirir alguno de sus productos.

Tomate seco en aceite de oliva, de La Molienda Verde

Como para los chinos el año puede ser el de la rata o el del dragón, este 2021 ha sido para mí el del tomate seco en aceite. Me ha faltado echárselo al café con leche. En bocadillos, en ensaladas, en platos de pasta… Un despiporre que solo se explica si al deshidratar estas frutas le echan nicotina, como en aquel capítulo de Los Simpson. De entre todos los que he probado me quedo con el que elabora la cooperativa malagueña La Molienda Verde, que combina genial el intenso sabor del tomate seco ecológico cortado en mitades con el aceite de oliva virgen extra, un poco de orégano y el punto justo, muy agradable, de ajo. Por fin una droga sana. Precio: un tarro de 240 gramos cuesta 4,50 euros en la página de la cooperativa.

Mantequilla con sal de Los doce linajes de Soria

“Hola, soy Inma Garrido y soy una víctima del marketing de guerrilla, lo reconozco”, confiesa de pie Inma mientras el resto del equipo de El Comidista, sentado en corro, aplaude con desgana. “A mí si me pones un envase bonito, tienes mis ojos ganados. Si encima tienes un sabor auténtico, natural y de los que te hacen entender que aquello que habías estado comiendo hasta ahora en tus desayunos no era mantequilla, te doy mi corazón. Eso es lo que me ha pasado con esta mantequilla”, cuenta esta periodista, que añade: “Me encanta su sabor a mantequilla de verdad y el olor a nata me flipa”. Precio: en supermercados como Alcampo, la lata de 250 gramos cuesta 3,25 euros.

Morcilla de Embutidos Entrepeñas

“La primera vez que pruebas la morcilla de Entrepeñas te preguntas: ¿cómo he podido vivir sin conocerla?”, señala Mikel López Iturriaga. Este producto se elabora en Geras (León) a la manera tradicional de la zona, y según Mikel, “este delicioso y ultracremoso embutido no lleva arroz sino miga de pan, y la presencia de pimentón picante garantiza grandes satisfacciones a los adictos a la capsaicina”. Además, la empresa vende esta morcilla en dos versiones: curada y en conserva lista para untar. Precio: la curada, de unos 700 gramos, cuesta 5,20 euros en la tienda online de la empresa; el bote de untable de 360 gramos sale a 3,20 euros.

Crema de Chirivía Special, de Aldi

La encargada de las redes sociales comidísticas, Patricia Tablado, elige esta crema de chirivía de Aldi como uno de sus productos del año: “Es una crema estupenda para el invierno cuando no te apetece cocinar. Su sabor es muy suave y no tiene ingredientes rarunos”. Aunque asegura que está buena tal cual sale del brick, cuenta que le suele echar un poquito de pimienta y/o lascas de parmesano para alcanzar el clímax culinario invernal. Precio: un bote de 490 gramos cuesta 1,95 euros.

Mermelada de jalapeño y hierbabuena de Doctor Salsas

Mònica Escudero expone que no es “muy dulcera”, así que las mermeladas que compra son un poco especiales, y más para quesos y carnes que para tostadas, como esta de jalapeño con un toque de hierbabuena de Doctor Salsas. “Pica muy poco, la hierbabuena le da un punto de frescura muy interesante y te anima igual una hamburguesa que un bocadillo de cheddar fundido, aunque lo que más me gusta es ponerle un par de cucharadas generosas a la salsa de tomate de unas albóndigas”, sugiere la editora comidista. Precio: el bote de esta mermelada cuesta 6 euros en la tienda online de la marca.

PARA EL POSTRE

Turrón cremoso de almendra con pistacho a la sal, de Torrons Viçens

Abrimos este ladillo de postres con uno de los dulces más navideños que existen: un turrón. Para ser más exactos, con el cremoso de almendra con pistacho a la sal que produce Torrons Viçens, que es uno de los delirios gastronómicos de 2021 para Jordi Luque. “Imagina el turrón de Jijona más sedoso que hayas comido y añádele a): laterales de barquillo fino como oblea y b): tropezones de pistachos salados. Si esto no es el summum de los turrones, si no es un gigantesco paso adelante en la turronería, si Isabel López Galera, excelentísima alcaldesa de Xixona, no otorga las llaves de la ciudad a este turrón -que se hace en Agramunt, pero las fronteras son inventos administrativos-, que venga Dios y lo vea”, reflexiona indignado el responsable de los vídeos comidistas. Precio: 10,75 euros una pieza de 300 gramos en la web de la compañía.

Hojaldres de la Confitería Blanco

El director de la orquesta Comidista, Mikel López Iturriaga, afirma que “todo el repertorio hojaldrado de esta pastelería de Torrelavega (Cantabria) merece ser aplaudido” (sus polkas ya fueron nuestro producto del mes en agosto). “Los almendrados, las palmeritas, las torrijas de hojaldre o (mi perdición) los pasteles con crema de mantequilla son un ejemplo de cómo hacer bien las cosas en repostería, sin trucos ni atajos”, asevera López Iturriaga sobre los dulces de esta confitería cántabra con más de un siglo de historia. Precio: puedes adquirir sus pasteles a través de la página web de la empresa, reparten a cualquier lugar de la España peninsular.

Chocolate del 70% con pepitas de cacao, de Valor

“Una onza de chocolate negro es una buena manera de finalizar un día lleno de idas y venidas, convirtiéndose en una pequeña sesión de terapia psicológica que dura lo que tardas en devorar la onza”, diserta el comidister Josep Navarro, que comenta que, en el caso del chocolate del 70% con pepitas de cacao de la empresa alicantina Valor, “el placer es aún mayor”. “Encontrarse una de estas pepitillas se puede convertir en todo un goce y disfrute”, concluye Navarro. Precio: puedes comprar una tableta de 170 gramos por 2,25 euros en Carrefour.

Chocolates de Lot Roasters

No dejamos el tema chocolatero aún, porque la editora jefa comidister Mònica Escudero nos aconseja probar los que elabora la marca Lot Roasters: “Traen pequeños lotes de cacao hasta Barcelona, donde lo tuestan, descascarillan y reposan para hacer chocolate, además de aprovechar absolutamente cada una de sus partes: con las cascarillas hacen infusiones, la manteca la venden a otros negocios… hasta conseguir el objetivo del residuo cero”. Según relata Mònica, todas las variedades que ha probado le han chiflado, tienen “carácter y mucha intensidad”. “También hacen algunas versiones con un poco más de leche y porcentajes de cacao más bajos, un detalle poco habitual entre los puristas”, apunta. Precio: a partir de enero tendrán en funcionamiento su tienda online, mientras tanto puedes encargarle un pedido a domicilio a través de sus redes sociales.

Plátanos de La Palma

“No es exactamente un producto con marca, pero nunca está de más recomendar el consumo de plátanos de La Palma. Primero, porque están buenísimos, y segundo, por las dificultades que están atravesando los agricultores de la isla por culpa de la erupción del volcán”, comenta Mikel López Iturriaga. “A veces tienen marcas causadas por la ceniza, pero eso no afecta en absoluto a todas las virtudes gastronómicas y nutricionales de su interior”, apostilla Mikel. Precio: los puedes encontrar en tiendas online como Frutique o en algunos grandes supermercados como Carrefour.

Tartas de queso de Jon Cake

Las tartas de queso, como Dios y los mecheros Clipper, están por todas partes. Y eso, claro, ha provocado que Mikel esté “hasta el mismísimo níspero de ellas”. “Por eso me parece que las de Jon García tienen todavía más mérito: por muy empachado que estés de este postre, este bilbaíno afincado en Barcelona las ha llevado a un nivel de excelencia que te hace olvidar el hartazgo”, elogia López Iturriaga. Según describe el marajá comidista, “saben a queso de verdad, su cremosidad es orgásmica, y las tienes en diferentes variedades según el queso protagonista. Mi favorita es la de Idiazábal”. Precio: desde 12 euros puedes comprar una tarta de Jon Cake, aunque solo reparten en Barcelona capital y algunas localidades de alrededor.

PARA ADEREZAR

Sazonadores de Just Spices

“Las mezclas, hierbas aromáticas y especias secas, sin potingues, vienen en unos botecitos con un diseño muy mono, envasados al vacío, y hay una para casi cualquier cosa que se te pueda pasar por la cabeza: desde un sazonador para huevos revueltos a otro para arroz con leche, curry de Madràs, sal de tomate -increíble esto-, aderezo para pollo, para pescado, para risotto o cuscús”, detalla Jordi Luque. “Uno de mis favoritos es el botecito de caldo de verduras: si echas tres cucharaditas a medio litro de agua tienes una base perfecta para prepararte una crema de verduras, por ejemplo. Dirás “¡Qué pijada!”. Pues sí, pero cada mezcla está muy bien conseguida”, dice Jordi mientras encarga un chándal de Versace. Precio: desde 3,99 euros puedes hacerte con un bote de especias de 32 gramos.

Pebre de cirereta de Crespí

“Me lo regaló Aixa, una mallorquina con la que comparto club de lectura gastronómico, y se ha convertido en un imprescindible en mi cocina”, dice Mònica Escudero sobre este pimentón picante producido con la variedad cirereta, típica de las Baleares. “Tiene mucho aroma y un picante alegre que me recuerda al del pimiento de Espelette, y sirve igual para animar un pulpo cocido que unos huevos a la plancha, patatas al horno con aceite o mantequilla. Resumiendo: para todo”, concluye Mònica. Precio: 4,40 euros el bote de 30 gramos en la tienda online de Crespí.

Aceite de oliva virgen extra de Le Naturel

“Vintae es un gigante del vino que ha sabido gestionar proyectos en distintas regiones sin que pierdan su esencia. Uno de ellos es Aroa Bodega, de Navarra, que tiene –entre otras referencias– un par de garnachas dignas de admirar y fáciles de encontrar, Aroa Mutiko y Le Naturel”, ilustra Jordi Luque. Bueno, pues la compañía ha usado esta última denominación, Le Naturel, para nombrar al aceite de oliva virgen extra que elaboran con un tipo de aceituna llamado Arróniz. “Es una barbaridad, tiene un saborcillo a frutos secos que enamora. Además viene en un estuche y en una botella preciosos para regalar”, detalla Jordi mientras me envuelve una cajita que no sé qué contendrá. Precio: una botella de medio litro cuesta 19,90 euros en la web de Vintae.

Aceite de oliva virgen extra picual cosecha temprana, de Casa Juncal

En el Mercadona, como en los chaquetones al llegar el invierno, hay maravillas escondidas que no esperas encontrar. Una de ellas es este aceite de oliva virgen extra que produce la empresa Oro Bailén para esta cadena de supermercados bajo la marca Casa Juncal. Como muestra la etiqueta, está elaborado con aceitunas de la variedad picual recogidas “entre finales de octubre y la primera quincena de noviembre” (puede que lo único interesante que ocurre en esa fecha). Su sabor suave aunque con cuerpo, un leve picante final y un asequible precio de venta, todo ello en conjunto, te produce un gustirrinín comparable a encontrarte dinero en el bosillo. Precio: una botella de medio litro cuesta 3,95 euros.

PARA BEBER

Leche entera fresca de La Colmenareña

Antes de hablar de alcoholes varios nos detenemos en la recomendación láctea que nos hace Patricia Tablado: “Es de esas que encuentras en la zona de refrigerados, y lo cierto es que sabe a leche de verdad, está buenísima”. Aunque La Colmenareña vende botes de un litro, Patricia confiesa que, cuando te compras uno, “lo más difícil es no beberte el brick entero”. Así que ya sabéis: comprad mejor unos cuantos del tirón. Precio: en supermercados como Hipercor cuesta 1,09 euros el litro.

Infusión Calma tu karma, de Orballo

Seguimos sin meternos en temas etílicos porque Patricia Tablado también nos aconseja que tomemos la infusión Calma tu karma, que produce la empresa gallega Orballo. “Me gusta mucho, huele a lavanda y a malva y no sé si relaja o no pero me podría tomar trescientas una tras otra”, afirma la encargada de las redes sociales de El Comidista. “Además, la marca cuida el medio ambiente y todo lo que incluye el producto, desde el paquete al contenido, es ecológico”, añade Patricia. Precio: 15 bolsitas cuestan en la tienda online de Orballo 3,55 euros.

Manzanilla pasada en rama Xixarito, de Bodegas Barón

Habrá quien imagine que se trata de una aceituna pocha que por algún motivo se ha dejado en el árbol. Pues no: esta manzanilla -ese vino único elaborado con uva palomino fino que solo se produce en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz)- se dice que viene “en rama” porque ha sido sometida a un proceso de filtrado mínimo, y “pasada”, porque ha envejecido más años de lo que suele ser normal bajo velo de flor (un manto de levaduras que se crea en la superficie del vino). En esta concreta categoría me gusta mucho la que produce Bodegas Barón bajo la marca Xixarito, una manzanilla de color algo más oscuro y sabor intenso, con una acidez justa que me encanta. A ver, no soy enólogo ni catador profesional, pero lo cierto es que disfruto mucho con una copa de Xixarito, que, además, se vende a un precio asequible. Precio: la botella de 75 cl sale a 12 euros en la web de Bodegas Barón.

Vino blanco espumoso de Blanc Pescador

“A lo mejor algún sommelier me querrá meter en la cárcel por esta recomendación, pero yo os digo que está rico, de verdad de la buena”, asegura la periodista Carmen López sobre este vino de la bodega catalana Blanc Pescador. “Lo puedes comprar en el supermercado a un precio muy asequible, pero cuidado que entra solo y como te despistes te bajas la botella. Sus fabricantes se han ganado unos dinerillos a mi costa este año, desde luego”, dice Carmen. Precio: por 3,60 euros puedes comprar una botella de 75 cl de este vino blanco en supermercados como Carrefour.

Crema de licor de Ego Galego

Culminamos esta lista anual con un chupito de la crema de licor que vende Ego Galego, la última recomendación de la editora comidister Mònica Escudero: “Ellos añaden en la etiqueta ‘receta familiar’, y es tal cual: concretamente la de la familia de Estrella Justo, fundadora de Ego Galego, que tardó más de un año en poder producir una crema que supiera exactamente como la que prepara la prima Isabel (la reina licorera del clan)”. Según cuenta Mònica, la producen en un pequeño obrador ourensano, “y tiene el punto justo de dulzura y lácteo para convertirse en adictivo, sin demasiado alcohol -15 grados- y muy sabroso”. “Puedes tomarlo tal cual, con hielo, con el café o combinado con el licor café de la misma línea”, recomienda Escudero. Precio: 12,50 euros una botella de 70 cl en la tienda online de Ego Galego.




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