Hace algunas semanas os hablamos de la importancia de limpiar periódicamente las brochas de maquillaje para eliminar las impurezas y bacterias acumuladas. Hoy es el turno de los peines, que necesitan una limpieza en profundidad cada cierto tiempo. De lo contrario, te estarás peinando con un objeto que acumula enormes cantidades tanto de pelo como de grasa. Te explicamos cómo limpiar los cepillos del pelo paso a paso para que no te pierdas nada.
Limpieza semanal
Una vez por semana debes hacer lo siguiente para tener siempre los peines perfectos.
El primer paso consiste en retirar con la mano todo el cabello que se haya quedado acumulado. A continuación, llena un recipiente con agua tibia y jabón pH neutro, e introduce el cepillo.
Si notas que está muy sucio puedes frotarlo con un cepillo de dientes limpio. Déjalo en el recipiente a remojo durante 5 minutos.
Una vez transcurrido el tiempo, sácalo y sécalo con un trapo. Agítalo sobre el lavabo del baño para quitar todo el agua restante, ¡y listo!
Desinfección mensual
Además de la limpiar los cepillos del pelo una vez a la semana, es conveniente que los desinfectes una vez al mes. Puedes hacerlo con agua y vinagre, o con agua y amoníaco.
El primer remedio casero es tan sencillo como mezclar en un bol medio vaso de agua y medio vaso de vinagre. Luego, introduce el peine y déjalo a remojo 30 minutos. Por último, enjuaga y deja secar.
Si prefieres utilizar el amoníaco, debes mezclar un cuarto de vaso de esta sustancia con un vaso de agua. Cuando lo tengas listo, remoja el cepillo, enjuágalo en abundante agua tibia y deja que se seque al aire.